Hay muchos días extraños, no les parece? Como esos días en los que se levantan y lo único que quieren hacer sobre todas las cosas es hablar con una sola persona, o salir corriendo a verla, o como cuando solamente quieren huir de esa persona a la que buscaban desesperadamente solo unos días antes; pero hay días aun mas extraños, esos en lo que te levantas y no tienes problemas en estar contigo, cuando no importa que no haya nada que hacer, que no haya nadie, tu no te jodes, tu vida no se deshace, no sientes ganas de llorar, ni de salir corriendo a cualquier parte en donde tu no estés, en donde te hagan olvidarte aunque sea por 10 segundos y dejes de sentir tu propio peso agobiándote, aplastándote.
Pero también están el resto de días, los mas comunes, aquellos en los que no quieres estar, o en donde la maldita rutina no te deja ni pensar, ni darte cuenta de que estas pasando tus días con personas que en su mayoría te aburren, que estas perdido, que te sientes solo triste y confundido, completamente abrumado por tu propia existencia y que no tienes idea del camino que debes tomar, o de las decisiones que tienes que asumir, y que peor aun te sientes totalmente fracasado por que años atrás suponías que esa sensación a estas alturas de tu vida debía haber pasado, y que por fin habrías encontrado lo que te gusta, sabrías lo que quieres o que por lo menos, si aun estabas perdido ya no estarías adoleciendo, como cuando tenias 14 años, y te sumerges dentro de la nostalgia, pensando en cada una de las decisiones que tomaste, e intentando encontrar donde estuvo el error, pero buscas y buscas y parece que no llegas al maldito final de la cadena y todo en tu vida parece demostrarte que no has sido nada mas que un pusilánime, que no has tomado ninguna decisión a conciencia y que simplemente has flotado a la deriva toda la vida, dejando que todos tomen decisiones por ti, desde que estudias en donde y cuando, hasta de quien te enamoras, o mas bien, si lo que sientes debe ser considerado como enamoramiento o no.
Y de repente un día (aunque también pueden ser muchos días) te levantas en la mañana, o en la noche, o solamente te levantas de una silla y piensas que ya no puedes mas, que es hora de hacer algo, y un segundo después, casi en el mismo instante en que terminas de pensar en eso, caes de nuevo, sin saber como enfrentar el mundo, sin tener ni la mas pequeña idea de por donde comenzar, y vuelves a evadirte, del mundo, de ti, y no se, lees (obviamente a personas que te hacen sentir mejor, no por que escriban historias rosas de amores y destinos encontrados –aunque algunas veces ese tipo de historias también funcionan- sino por que de alguna manera te hacen caer en cuenta que otros individuos tan disfuncionales como tu van caminando por la calle, por que te permiten entrar en sus cabezas desvariantes, y tu te unes en sus desvaríos y en sus fantasías…), vas al cine, bebes, escuchas música, algunos se drogan, no se, saltas de un puente, rompes vidrios de tiendas de barrio, en fin…, solo haces algo para no escuchar a la mantis que vive en tu cabeza y que seguramente si hubieras hecho algo antes no habría dejado de ser un simpático pepe grillo, y que es mas, ahora poco a poco se va comiendo tus recuerdos y pensamientos, para solamente ir dejando dentro del disco duro toda la mierda fruto de esos pensamientos procesados por su tracto digestivo.
Entonces, como intentando reparar el daño de al mismo tiempo no ponerme cuidado, ni cuidar de mi, pero igualmente, darme duro, actuó como casi cualquier padre y me pregunto que me hace feliz, como si quisiera hacerme un regalo, de repente me doy cuenta que no soy mas que otro humano superficial y posudo, y que ni aun sabiéndolo soy capaz de aceptarme, por que quiero mas, y recuerdo que ¡coño! No se a donde voy, ni se que me gusta, ni quien me gusta, o es mas, no se siquiera que me gusta de mi, y me aterro, por que ahora a todo ese gran conjunto de temores (por que eso si, para este momento tu única certeza es que tu constancia es el miedo) se une el del vació…
Después de eso, no queda mas que cuestionar cada una de las cosa que has vivido, mas bien, de cuestionar las sensaciones que cada una de esas diferentes situaciones te han generado, preguntarte si han sido sinceras o no, o si mas bien has asumido que representan otro montón de cosas por que hasta las telenovelas te indican que ese es el curso de las cosas, y que lo que sientes en ese momento se llama tristeza, o dolor, o desengaño, o lo que sea, es solo por hacer un ejemplo, aunque este sea tonto, el caso es que finalmente hasta empiezas a desconfiar de todo aquello que has sentido y dudas que en algún momento por ejemplo te hallas sentido realmente feliz por algo, o que hallas estado realmente preocupado, o cualquier cosa, después de eso, solo te queda decir, ¡Mierda!, que coños e hecho en todos estos año? Y solo esperas que lo que escribes tarde en la noche en tu computador tenga un buen final, y te deje un consejo, una moraleja, un llamado a la cordura, algo que te haga sentir mejor.
