Cuando sea grande, aparte de querer parecerme a Shirley Manson de Garbage, a la cantante de The Cardigans, Nina Persson, o a Kate Pierson, la pelirroja de los B-52 (si, a ella, tiene mucho estilo) quiero ser… Bombero… de hecho, siempre he querido meterme a ese tipo de cursos.
Cuando sea grande, voy a vivir en un edificio vivero, donde todo el centro sea un gran jardín verde, en donde pueda tener una pequeña huerta, rodeado por vidrios; el edificio tendrá escaleras metálicas y paredes de ladrillo, mi cocina será grande, quedara en el primer piso, la estufa estará en el centro, tendré un horno para hacer pan, y para esa época, es posible que cocine algo mas aparte de verduras; mi taller, también estará en el primer piso y tendré todas esas hermosas maquinas y herramientas que me gustan, y por que no, también esos pinceles y pasteles y demás, que también me gustan (aunque no soy tan buena con ellos), junto con un par de cámaras, y seguramente un cuarto oscuro con una olvidada ampliadora, que si uso, lo haré seguramente para ampliar esos muñequitos ñoños de papel que hago y títeres de sombra. Como ven, será un gran, gran taller…
En el siguiente piso, una sala con muchos ventanales por donde echar chisme, y obvio, un par de binoculares, por que no, pongamos también un par de cuartos para las visitas y como debe ser, un buen baño.
En el tercer piso, mi cuarto y mi baño, con una gran cama, y una linda biblioteca. Finalmente una gran terraza, con un asador y sillas cómodas para asolearse.
Cuando sea grande quiero ser feliz haciendo lo que me gusta, es decir haciendo cosas bonitas, macheteando objetos, y haciéndome la huraña metida entre el taller y asfixiándome con gases nocivos. Cada tanto, me darán arranques de querer ver gente (aunque confió que en casa, casi siempre haya alguien mas aparte de mi y los gatos, como en mi casa ahora, donde casi todos los días alguien me visita), y saldré a caminar y a mirar mal (jajaja), y ojala para esa época, haya recapturado uno de esos lugares para tomarme un wisky o una cerveza en la barra, mientras hablo con el barman, o leo un libro.
Cuando sea grande, no me voy a preocupar por el dinero, no por que vaya a tener mucho (por que como he dicho muchas veces, el dinero en exceso no le sienta bien a casi nadie, las personas se vuelven feas y tratan mal a sus congeneres, que si es cierto, habitualmente se merecen el mal trato –los humanos somos horribles, menos mal tengo asilo marciano, lo que me hace menos fea-, no es algo que este bien hacer) si no por que voy a tener lo suficiente para vivir bien y hacer lo que quiero, además por que espero tener tiempo, y finalmente voy hacer algunas de mis cosas con mis manos (lo que me recuerda, también voy a tener una maquina de coser), y voy a ser un verdadero “hombre del renacimiento”.
No mal interpreten, no me haré una hippie (tengo muchos amigos-conocidos que con gusto usarían una camiseta que dijera “Hippie Killer”), no podría, soy una maldita consumista, adoro ir de compras y tener muchas cosas inútiles, bonitas y a veces lobas (por que todos tenemos un lobito en nuestro corazón), pero también adoro la figura de “la casa que construí con mis manos”, y por que no, que tal que algún día tener algo de lo que yo hice sea tener una verdadera joya, que en varios, muchos, muchísimos años, mis cosas sean verdaderos vintage, objetos de colección (el soltlecito, siempre ha dicho que una vez muerta mis libretas costaran, como artículos de colección, pero es que el me quiere mucho), no quiero morir encerrada en una oficina, trabajando para alguien mas, trabajando en lo que me toque (por que “cuando no hay mas con mi mujer me acuesto”) siguiendo el camino fácil, no quiero ser una mediocre, no quiero convertirme en gentecita, con vidas sin sentido y rutinas que odian sin saberlo, por que solo hacen lo mismo día tras día por que les toca, por que “uno no es lo que quiere si no lo que puede ser”, por que hay que pagar el arriendo, las pensiones del colegio de los crios e irse de vacaciones a nalgar a final de año, por que ya se me olvidaron todas las cosas que creí y me desperté y una vez despierto a uno se le olvidan los sueños, y se pierden las ganas… no, no soy una arrivista, a las personas les toca hacer cosas que no quieren, pero no hay que acostumbrarse a ello y limitarse, los que se limitan, son los que son gentecita, y hay gentecita en todas partes.
Tengo miedo, aun no se que voy a hacer, todos los días me lo pregunto, y lo peor, tengo a muchas personas que me lo preguntan también, voy por partes, voy despacio, siempre hay tiempo, hago cosas, aun se me ocurren ideas, y cosas para hacer, y aun lucho con el tedio, y hago, aun me conflictuo, aun no he cruzado la línea, aun tengo salvación, aun no soy gentecita.
Ah! Y por su puesto, cuando sea grande quiero tener una banda de rock, escribir un libro, tener un hijo y sembrar un árbol… Bah! Escribo cuentos, tener un hijo… aun no quiero criar un monstruo, ya he sembrado muchas plantas en mi vida, y por lo de la banda, como soy yo, en vez de terminar roqueando, tocando una batería o un bajo (hay que recordar que soy arrítmica totalmente), seguro termino en un coro, o tocando algo en una banda de guerra, eso si, jamás una tuna… pero soy yo, soy especialista en inmortalidades ridículas.
