AÑO NUEVO…

Al fin se acabo esa horrible época decembrina (temporada difícil para los grinch, que cada año se hace mas larga por que empieza mas temprano), ya pronto se va a descansar de esa aturdidora sobredosis de luces tintineantes que de alguna manera logra que las personas se pongan frenéticas, ya por fin se le dice adiós a esas obligadas y casi siempre aburridas reuniones familiares, para retornar a la saludable distancia que permite mantener relaciones cordiales y aumentar el cariño entre los parientes, poco a poco Bogota deja de ser una ciudad desierta con unos cuantos oasis que permanecen llenos, mientras sus alrededores se encuentran aterradoramente vacíos, para que todo siga su curso normal.

Pero el fin de diciembre solo quiere decir que se paso otro año (en el que ni Papa Noel ni el Niño Dios me trajeron el regalo soñado, pero al menos tampoco desperté con un pedazo de carbón junto a la almohada) que dejo sus lecciones, como que mi gato nunca me va a dar las gracias después de que limpio su cajita, y que tampoco se va a sentar ni va a dejar de maullar cuando le sirvo su comida (y esto no por que no entienda, simplemente por que no se le da la gana hacerlo), que hay que ser mesurado con el dinero, sobre todo si ya no se vive con la familia (cosa difícil que creo que nunca lograre), a ser mas constante con prácticamente todo, que todos pelamos el cobre, y que algunas veces es mas bien plomo lo que sale (si, si, finalmente algo venenoso y maleable), que lo mejor del fin de año es la música navideña (excepto canciones como las de “mama donde están los juguetes”, completamente miserable, y “navidad que vuelve, tradición del año, unos van alegres, otros van llorando”) y que este ya es momento de empezar a hacerme una vida, eso si, teniendo siempre varios planes de reserva por si las cosas no funcionan.

Como en teoría este es el año en el que finalmente empieza mi vida adulta, con la entrega de tesis, un merecido grado tras años de fiel entrega a la academia, y un diploma que me ratifica como un profesional mas, posible individuo productivo para la sociedad, hago una lista de los propósitos que marcaran este 2007, sopena de las reprimendas sociales que su incumplimiento me pueda acarrear:

1. Caminar derecha.
2. Desparasitar puntualmente al gato.
3. Romper mi adicción a la coca cola (aclaro, no de dejar de tomarla, nada mejor para una resaca que un vaso de coca cola fría).
4. No perderme un solo capitulo de la nueva temporada de Project Runway.
5. Mantener la sana costumbre del “viernes de museo”.
6. Hacerme otro tatuaje.

Pero eso si, seguro para el próximo año, cuando ya tenga una vida estable como adulto contemporáneo y devengue millones de euros, empezare una dieta balanceada, posteare cosas mas interesantes y tendré una cuenta activa en el flickr, y por que no, en el banco, dejare todos mis malos hábitos como fumar y beber, comenzare a hacer ejercicio y me afiliare a algún gimnasio para ir sagradamente 3 o mas días a la semana (como lo permita mi copada agenda), encontrare el apartamento perfecto, y el trabajo soñado!!!!